Trufa negra

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Debemos saber que la trufa negra es un hongo que se encuentra bajo tierra, siendo así uno de los alimentos más cotizados y que es conocido como el diamante de la cocina, en gran parte gracias al sabor que nos otorgará en las comidas que preparemos haciendo uso de ella. Tenemos que tener en cuenta que tanto el sabor como el aroma que nos ofrece son muy intensos y que consiguen darles un sabor muy especial a nuestros platos. Es por ello, por lo que podemos encontrarnos cada vez más la trufa negra presente en cada uno de los platos que consumimos en nuestro día a día.

La trufa negra, además proviene de hace muchos años atrás ya que por ejemplo tanto los egipcios como los griegos lo utilizaban en la cocina de sus platos, no tanto por el sabor que otorgan sino por los beneficios medicinales que tienen, ya que incluso en la cultura grecorromana es reconocido como un valor afrodisiaco. Esto no es algo en lo que estuviesen equivocados ya que las trufas tienen varios beneficios para la salud como son la mejora del funcionamiento del sistema nervioso y circulatorio.

La trufa negra es un alimento que antes de utilizarlo debemos conocer cada una de las peculiaridades que tiene. En primer lugar, la trufa negra durante los primeros 15 días desde su recolección mantiene en plenitud tanto su aroma como sabor, por lo que recomendamos que el consumo ideal de la misma se realice de forma fresca evitando así congelarla.

Por otro lado, uno de los grandes beneficios que tiene la trufa negra es que no necesitamos utilizar grandes cantidades para dar sabor a los platos que preparemos ya que su intenso aroma nos va a permitir, poder trabajar con este producto utilizando pequeñas cantidades, de ahí su alto coste ya que pocos gramos de esta aportarán sabores excepcionales a cada uno de los platos que preparamos.

La trufa negra nos puede ofrecer una amplia variedad de opciones en diferentes comidas que no tienen nada que ver entre ellas, como es el caso patatas, carnes blancas, ensaladas, foie o incluso los huevos. Independientemente de los platos que preparemos debemos saber que la trufa debemos emplatarla siempre con el plato finalizado y desde Truffal no recomendamos someterla a la cocción ya que sus propiedades se pueden ver afectadas.

Además, el mejor corte para aprovechar la mayoría de la trufa negra en su totalidad es realizando el corte laminado y a ser posible mediante rodajas finas y lisas, manteniendo así su virtud aromática y le sacaremos el mayor partido posible. También, debemos tener en cuenta que la trufa no necesita de participar en grandes elaboraciones ya que la trufa en sí nos permite aportar un gran sabor y olor, modificando el resultado de cualquier plato.

La trufa negra debemos saber cómo tenemos que limpiarla y conservarla para así conseguir mantener sus propiedades durante el máximo tiempo posible. Es importante tener en cuenta que mantener sus particularidades nos es nada fácil por ello lo vamos a explicarlo a continuación.

El mejor método para conservarlas es envolverlas en papel de cocina absorbente y posteriormente introducirla en un tarro hermético de cristal cambiando el papel de cocina cada día permitiendo que se renueve el aire del tarro. Una vez vayamos a hacer uso de ella, es importante realizar una limpieza complementaria, lo ideal sería realizarlo utilizando un cepillo suave pare retirar las impurezas y mediante el uso de agua fría. Una vez hayamos realizado estos pasos, podremos disfrutar de nuestras trufas negras en nuestras recetas.

Desde el sembrado de la trufa, el hongo tarda de 5 a 7 años en madurar, y debido a las temperaturas de esta época, su recogida se produce desde mediados de noviembre hasta finales de marzo. Debido a esto, verás que su periodo de venta coincide con el periodo de recolección.

Como ya te hemos comentado la trufa es un hongo, por lo tanto, requiere de unas condiciones climáticas muy específicas para su correcta recolección. Es por ello por lo que dicho proceso de recolección requiera de mucho trabajo y esfuerzo. Una muy buena zona de recolección de trufa negra se da en Teruel, donde Truffal tiene ubicados sus terrenos. Cabe destacar que Teruel es la provincia en el mundo más productora de este hongo. En cuanto a las temperaturas idóneas para recolectar la trufa negra se encuentran entre los 11ºC y los 14ºC.

La trufa negra crece a una profundidad de unos 15 a 25 cm y aparece en las raíces de los árboles como el roble, la encina o la carrasca, siendo el principal la carrasca.

La principal razón por la que deberías comprar trufa negra es su sabor. Pese a existir alrededor de 100 variedades de este manjar, el sabor de la trufa negra es único por su intenso aroma. Destacan sabores como el de frutas, caramelos, champiñones o incluso el cuero. Sí, el cuero. Y es que es algo tan difícil de explicar por la increíble mezcla de sabores, que deberías experimentar que se siente por tu propia cuenta.

Otra principal razón por la que comprar trufa negra son sus múltiples propiedades beneficiosas para la salud. Una de las más importantes podría ser el favorecer a la pérdida de peso, siendo así una gran aliada en nuestras dietas. Esto se debe a que posee una cantidad de agua muy elevada.

También, debido a que se encuentra bajo tierra a temperaturas bajas, favorece la aparición de minerales en su composición como son el potasio, fósforo y yodo entre otros. Eso sí, para poder aprovecharnos de todas estas múltiples propiedades beneficiosas se debe de consumir la trufa negra fresca, sin pasar por ningún proceso de cocinado.

El método principal de recolección de la trufa es mediante perros adiestrados para esta difícil tarea. Existen métodos alternativos como pueden ser cerdos, moscas o incluso jabalíes, pero ya no se utilizan a penas. Hablemos del método con perros adiestrados:

El adiestramiento de los perros truferos no es tarea fácil, de hecho, se suele contratar a gente cualificada para esta tarea. Hay que armarse de paciencia y nunca desanimarse ya que se necesita invertir muchas horas para lograr el objetivo. El adiestramiento comienza con juegos, en el que se “engaña” al perro con un juguete con olor a trufa para que vaya acostumbrándose. Pero ¿qué tipo de perros se suele utilizar para adiestrar?

Más allá de hablar de razas, hay que darles importancia a las condiciones de los perros, ya que tienen que encontrarse en unas condiciones óptimas para poder realizar la difícil tarea de encontrar las trufas negras. Las mejores razas de perros truferos son:

Lagotto Romagnolo: Es el perro más utilizado para este fin. Su olfato es muy fino y es una raza de perro muy sumisa, por lo que presenta muchas facilidades a la hora de ser adiestrado.

Spaniel de Bretaña: Esta raza de perros francesa posee un carácter muy tranquilo, además también cabe destacar que su virtud principal es la resistencia, por lo que son ideales para partidas largas en busca de la trufa negra.

Pastor alemán: Raza de perros muy conocida por ser perros atléticos y robustos, cualidades que son muy valoradas en la recolección de la trufa.

La trufa negra es un producto ciertamente difícil de conservar ya que requiere de unas condiciones para su almacenaje un tanto complicadas. Para empezar, una vez recolectada la trufa negra, se mantendrá en perfecto estado un periodo de entre 7 y 10 días. Y el posterior almacenaje del hongo se deberá hacer a una temperatura de entre 0 y 4 ºC.

Por lo tanto, en Truffal nos gusta que recibáis un producto de calidad, bien conservado y con las mejores cualidades posibles. Es por eso por lo que siempre recibirás la mejor trufa negra fresca que podamos ofrecerte.

La trufa negra es una exquisitez culinaria que se ha convertido en un producto muy valorado en todo el mundo. La calidad de la trufa negra es un factor crucial para garantizar una experiencia gastronómica inolvidable.

Existen diferentes tipos de trufa negra, cada uno con características únicas en cuanto a su forma y calidad. En primer lugar, la trufa negra extra es aquella que presenta una forma regular y una corteza sin imperfecciones en un 95%. Este tipo de trufa es altamente valorada debido a su apariencia visual, ya que permite laminarla con facilidad y obtener láminas simétricas y redondas.

La calidad primera, por otro lado, presenta una forma irregular y una piel sin imperfecciones en un 80%. Aunque su apariencia no es tan regular como la de la trufa negra extra, la calidad de su aroma es muy alta y su sabor es exquisito.

La calidad trozo se refiere a trozos de trufa negra partidos que, a pesar de su forma, son de buena calidad para comercializar en fresco. El corte que presentan estos trozos es ideal para comprobar la buena maduración de la pieza.

Finalmente, encontramos la trufa pequeña, que se caracteriza por tener un tamaño menor (entre 8 y 20 gramos) pero presenta las mismas características que las piezas más grandes. Su única "limitación" es su volumen, pero su sabor y aroma son igualmente excepcionales.